miércoles, 2 de abril de 2014

Diario de una madre primeriza: la llegada a casa

Esta semana vuelve también nuestra sección Diario de una madre primeriza. Hoy vengo con una de las partes menos agradables del proceso. Hasta ahora os he contado "un cuento de hadas", embarazo y parto fueron de libro y, aunque el posparto también, la llegada a casa s quizás de los momentos más duros.

Durante la estancia en el hospital te sientes protegido, sobre todo en los temas relativos al bebé, te resuelven cualquier duda, te ayudan y explican todo o lo hacen por ti.

La llegada a casa es bastante caótica. Has estado un par de días fuera de casa, poco más que un fin de semana, y las vivencias han sido tan intensas, que parece que ha transcurrido un mes. 

Además tu estás hecha polvo, aunque te estés recuperando muy bien. Apenas puedes sentarte por los puntos, te duelen las hemorroides (si amigas, del parto sales con hemorroides), la leche te está bajando o tarda en bajarte y sin saber porque no paras de llorar. Si chicas, lloras por cualquier motivo, con la consiguiente desesperación de tu pareja, que no sabe lo que te pasa y que incluso puede llegar a perder la paciencia.

Y luego está el bebé, no sabes nada de él, todo te da miedo, cambiarle los pañales o bañarle es un mundo...vas a urgencias por cualquier cosa.

Lo bueno de todo es que con los días van pasando y el bebé, con más o menos tropiezos va creciendo y a los quince días más o menos puedes empezar a respirar. Así que no desanimarse, es parte del proceso y hay que vivirlo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario