Ha llegado el otoño con sus días lluviosos, su cielo gris y los rojos, amarillos y ocres de las hojas. Es tiempo de coger castañas y hacer compota de manzana, del mismo color dorado que las hojas de los árboles.
En esta época no hay nada más relajante que un paseo por el bosque en busca de castañas y setas.
El amarillo mostaza de los árboles.
Mezcla de amarillos, verde y gris.
Hojas que se mueven al compás del viento otoñal.
Más hojas mezcladas con la hierba que ya empieza a salir.
Inspirándome en estos colores, grises y marrones, hace unas semanas salí a la calle con este look.
Y por encima le puse la capa de color camel para no pasar frío y una cartera porque con la capa es difícil colgarse un bolso. Aunque la gente considera la capa una prenda difícil de combinar, debo decir que yo me las pongo bastante a menudo en entretimpo, primavera y otoño.
Para terminar un detalle de los slipers con medias grises. Me gustó mucho como quedaban (lo dije ayer, estoy obsesionada con ellos).
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