Como sabeis los fines de semana me relajo y no os cuento en detalle, porque muchas veces no tiene mayor interés. Día absolutamente relajado, entre paseos por el campo con Sara y charlas con la poca gente que queda en el pueblo (en invierno quedan nada más que siete, pero ahora todavía queda gente de verano).
El tiempo estupendísimo y la casa helada, así que me saqué la mesa para trabajar fuera, en la puerta de casa. Me acordé de vosotros e hice una foto de lo que se veía desde mi "escritorio".
Acabé el día con un poco de constipado y algo destemplada...trabajé un ratín de nada antes de acostarme pero poco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario